viernes, 1 de marzo de 2013


Alemania suma sus tropas a la invasión en Mali



El Parlamento alemán aprobó el jueves el envío de 330 soldados al país africano de Mali donde Francia continúa con su invasión militar iniciada un mes y medio atrás. El objetivo expresado fue otorgar respaldo logístico a las fuerzas locales y sumarse a las tropas de la Unión Europea (UE) que días atrás aprobó una misión de alrededor de 12,3 millones de euros.
Una amplia mayoría de la Cámara Baja del Parlamento de Alemania, autorizó el despliegue de 180 soldados que se encargarían de la formación del Ejército maliense. A su vez, otros 150 hombres serán destinados a operaciones logísticas, tales como transporte aéreo y suministro energético.
El país germano ya se había comprometido con el aporte de alrededor de 20 millones de dólares para financiar la invasión a Mali en la Cumbre de la Unión Africana que se llevó a cabo a fines de enero. El marco político general es la adhesión a la misión aprobada por la UE para enviar al país africano más de 450 hombres con un costo de más de 12 millones de euros, en un contexto europeo en el que los estados están atravesando una fuerte recesión económica que se traduce en ajustes contra los pueblos.
La adhesión neocolonial alemana se suma a la fuerte participación de Estados Unidos, país que desde un comienzo avaló la invasión francesa y la apoyó con logística militar y 50 millones de dólares del fondo del Departamento de Defensa. A su vez, el presidente Barack Obama dio a conocer que cien soldados estadounidenses estaban desplegados en Níger con el supuesto objetivo de recolectar información de inteligencia y facilitar el intercambio de datos con las fuerzas francesas en Mali.
Lejos de la anunciada retirada,  Francia lleva destinados  más de 100 millones de euros para financiar la invasión en Mali iniciada formalmente el 11 de enero pasado. Con el aval del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el país galo desplegó sus tropas en el Estado africano bajo el argumento de colaborar con el gobierno maliense a detener a los grupos rebeldes en un marco de inestabilidad política. En ese sentido se avanzó por sobre diversas ciudades alcanzando el control de Gao, Timbuktú y Kidal.
Las fuerzas neocoloniales de Francia se desplegaron en territorio maliense en pos de avanzar sobre el dominio de los bienes comunes en la región occidental de África, tal es el caso de Níger y sus minas de uranio. Detrás de esos intereses, de inmediato otras potencias neocoloniales se sumaron a la iniciativa militar, tales como los mencionados Alemania y Estados Unidos.  Esa política que esconde el saqueo económico,  se articula con la que desarrolla el Comando África de los EEUU (AFRICOM) cuyo mensaje diplomático al mundo es que las fuerzas del país del norte de América y las fuerzas africanas son socios en la guerra contra el terrorismo y otras formas de conflicto.
via PIA.- 

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